La Corte de Honor de la Purísima Concepción fue fundada en 1945 y en la actualidad es la asociación femenina más numerosa de Yecla, contando en la actualidad con 1.600 socias, divididas a su vez en un total de 80 coros. Los coros son pequeñas agrupaciones dentro de la Corte de Honor con un número variable de mujeres, coordinadas por una celadora. Estas celadoras, 80 en total, tantas como coros existen, son las encargadas de cobrar las cuotas de las socias y de entregar las citaciones para las diferentes actividades que se llevan a cabo a lo largo del año entre las que destaca la labor solidaria y de ayuda que esta asociación católica realiza de forma silenciosa, pero para poder llevarla a cabo necesitan recaudar fondos, la fuente de ingresos, las cuotas de las asociadas, donativos, la tradicional venta de lotería de navidad y la venta de artículos, los que podemos encontrar todas las tardes de esta semana en la Basílica de la Purísima. María Serrano, miembro de la Corte de Honor nos cuenta los objetivos de esta venta de artículos.
Variedad de precios y de productos para que todos puedan encontrar el artículo que se adapta a sus gustos y necesidades, la característica común es que en todos ellos aparece la imagen de la Virgen del Castillo. Desde el popular lazo azul identificativo de la Asociación de Mayordomos hasta rosarios, medallas, velas, pulseras y variados diseños de modernos colgantes con el rosto de La Inmaculada es lo que podemos encontrar en el puesto que la Corte de Honor instala cada tarde junto a una de las puertas de acceso a la Parroquia, su misión, seguir recaudando fondos para continuar apoyando a los que más lo necesitan y ofrecer los cuidados a la Patrona, particularmente en su vestuario y conservación del Camarín y fomentar el culto y el amor a María en nuestra ciudad.
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Corte de Honor: Una labor callada pero de gran relevancia
La Corte de Honor de la Purísima Concepción fue fundada en 1945 por el cura párroco de La Purísima en aquel momento, José Esteban Díaz, y desde entonces, de forma ininterrumpida, ha estado encargada del cuidado de la Patrona, especialmente de su vestuario y del Camarín, además de tener como objetivo fomentar el culto y el amor a María en nuestra localidad, con el fin de que cada integrante de la Corte pueda llegar a ser mejor cristiana y mejor persona.